Por Alejandro Sánchez y María Pastor, diputados de Más Madrid-Verdes Equo en la Asamblea de Madrid
Garantizar una alimentación más saludable y sostenible en los centros educativos por medio del consumo de productos frescos y de temporada frente a los ultraprocesados, debería ser un objetivo prioritario de la administración autonómica. En este sentido desde Más Madrid–Verdes Equo hemos presentado una propuesta muy sencilla en el pleno de la Asamblea de Madrid que fue rechazada por la ultraderecha del PP y Vox, a pesar de que en las dos últimas legislaturas se habían aprobado iniciativas similares (aunque sin efectos reales sobre los contratos que rigen la alimentación de nuestros escolares).
El comedor escolar desempeña un papel fundamental en la nutrición y el desarrollo en la infancia y la adolescencia, especialmente en el caso de las familias más vulnerables. El comedor escolar es además una herramienta clave para estimular, fomentar y educar a jóvenes, niños y niñas en patrones alimentarios saludables y sostenibles y contribuye a reducir las desigualdades en salud, asegurando una alimentación variada, equilibrada y adaptada a las necesidades nutricionales de las primeras etapas de la vida con independencia del nivel de renta familiar. Aproximadamente el 50% de los niños y niñas de primaria hacen uso del comedor escolar.
En las últimas décadas, la prevalencia de problemas de salud relacionados con la alimentación ha aumentado de manera alarmante entre la población infantil y juvenil. La obesidad, la diabetes tipo 2 y otras enfermedades crónicas se están convirtiendo en graves problemas. Los datos más recientes revelan que hay un 17,3% de niños y niñas de 6 a 9 años con obesidad, y un 40,2% con exceso de peso. Ello afecta a la calidad de vida de estos escolares y se relaciona con baja autoestima, rechazo, fracaso escolar y exclusión.
En consecuencia, promover una compra pública saludable y sostenible para los comedores escolares no tiene más que retornos positivos. Por eso es tan difícil entender la negativa del PP de la Comunidad de Madrid a avanzar de forma más decidida en este sentido, tal y como están haciendo otras comunidades, muchas de ellas igualmente gobernadas por la derecha.
Es difícil de entender el rechazo a un comedor escolar que garantice los derechos de la infancia, pero por desgracia no es ninguna sorpresa. Ya vimos hace más de un año el rechazo del PP madrileño a nuestra propuesta de comedores escolares universales y gratuitos para que todos los niños puedan acceder a una comida saludable en el centro escolar y, además, aliviar el bolsillo de las familias.
La negativa permanente del Partido Popular para abordar las transformaciones que necesita el comedor escolar para ser una herramienta que garantice los derechos de la infancia, pero también como combatir la crisis climática sólo demuestra lo alejado que está de la realidad de las familias y la sociedad.
Es por ello por lo que, ante la incapacidad del PP de estar a la atura del momento, desde Más Madrid-Verdes Equo solicitamos al Gobierno de España que desarrolle esta cuestión a partir de la Ley 17/2011 de Seguridad Alimentaria y Nutrición, retomando el proyecto de decreto que quedó aparcado tras el adelanto electoral para el fomento de una alimentación más saludable y sostenible en los centros educativos.