El espectacular resultado de las elecciones del domingo en Baden-Wurtemberg y Renania-Palatinado ha demostrado que los Verdes Alemanes son una opción política con vocación de gobierno en la que los ciudadanos pueden confiar, y no simplemente un adorno minoritario condenado al ostracismo. Al mismo tiempo, los Verdes Franceses conseguían duplicar su representación en la segunda vuelta de las elecciones cantonales, superando los 60 representantes, una gran proeza teniendo en cuenta las dificultades de ganar en un sistema mayoritario de doble vuelta. Y una gran inspiración para los que queremos construir ese referente político verde, sólido y creíble en España. También puede ser un aviso a navegantes para aquellos que piensan que Proyecto Equo es una flor de un día, una suerte de submarino destinado a debilitar a las opciones existentes a la izquierda del PSOE, pero sin posibilidades de arraigar en nuestra sociedad. Sin embargo, encuesta tras encuesta vamos observando como gran cantidad de votantes progresistas pasan a engrosar unos preocupantes porcentajes de abstención, sin que esas fuerzas de izquierda tan preocupadas por nuestra existencia sean capaces de capitalizar la sangría socialista. Según los datos aparecidos en el diario Público de este lunes la fuga de votos del PSOE hacia la abstención se eleva al 17% frente al 4% que se escora hacia IU.
Desde luego, esto no significa que Equo vaya a capitalizar de la noche a la mañana toda esa abstención desencantada con los incumplimientos y las políticas de Zapatero y los demás partidos. Los verdes alemanes y los franceses nos llevan una gran ventaja, acumulando un largo historial político que incluye importantes experiencias de gobierno. En España carecemos de toda esa experiencia, por lo que existe un gran desconocimiento en el electorado hacia lo que un partido verde representa en cuanto a defensa no solo de la ecología, sino también de la equidad social, la democracia real y los derechos humanos dentro y fuera de nuestras fronteras. Pero si conseguimos explicarlo, estoy seguro que Equo se puede convertir en una auténtica opción para mucha gente de ideales progresistas, que ya no sabe a quién entregarle su voto porque no confía en nadie.
Así que tenemos grandes retos por delante. Romper ese gran desconocimiento va a resultar una tarea titánica, sobre todo cuando contamos con tan pocos recursos económicos y cuando el acceso a los grandes medios de comunicación, particularmente la televisión, se produce a cuentagotas. Contamos con un gran líder, es cierto, Juantxo López de Uralde, cuyo carisma y credibilidad personal permite superar muchas barreras. Pero necesitamos muchos más brazos para auparle y que se le vea representando a un gran colectivo. Estamos calando poco a poco en la opinión pública a base de tesón, imaginación y la implicación altruista de unos cuantos cientos de personas, pero todavía es insuficiente. Mi sensación tras estos pocos meses de existencia, es que Equo está despertando una gran cantidad de ilusión y de expectación entre gente de los más diversa. Mucho más diversa de lo que los propios promotores imaginábamos. Pero necesitamos demostrar mucho más en muy poco tiempo. Dentro de un año escaso serán las elecciones generales y debemos llegar con un número suficiente de simpatizantes y colaboradores como para realizar una campaña explicativa y propositiva que nos acerque a mucha gente que no sabe ni siquiera de nuestra existencia.
Los verdes franceses y alemanes nos han demostrado que la sociedad europea está preparada para recibir nuestro mensaje, y que con trabajo y tesón se pueden conseguir grandes resultados, aunque les ha llevado años conseguirlo. Esperemos que en España, donde el nivel de frustración política de la sociedad es incluso mayor -los políticos y la «clase política» son el tercer problema más importante para los españoles, tras el desempleo y la economía-, tardemos menos tiempo en conseguir al menos una digna representación institucional. Pero lo que es indudable es que cuanto antes empecemos antes llegaremos. Así que, manos a la obra, y a convencer a todos los indecisos que vamos en serio. Es el momento.
Todos juntos, el colectivo verde más vivo que nunca!!!!
Pero me temo que mal han empezado Ud. si intentando recoger el voto de los desencantados del PSOE, apoyan la intervención militar (llámese como se quiera) en Libia y como parece ser, apoyarían otras de semejantes características.
Aunque reconozco que es bueno saber de antemano su posición al respecto para no dejarnos engañar por las apariencias y seguir buscando.
Un saludo.
Sofia
Dices, que Equo ha empezado mal y me parece, que es lo contrario, pues esta conectando con lo que quiere una mayoria de la sociedad española y mundial. Antes de la resolución de la ONU. Mas del 60% de la población, pedia la intervención.
Esto no era igual en la intervención en Irak, los ciudadanos, que analizan la realidad, sin esquemas previos, saben distinguir.
Respecto a seguir buscando esto siempre es bueno y cada uno elige lo que mas le gusta. Personalmente, apoyo el proyecto Equo porque la situación de la politica y la sociedad española, necesita aires nuevos en la politica.Creo que, se equivocan los que creen:»que es flor de un dia» La sociedad civil, con sus votos es la que da legitimidad a las opciones.
Como bien, ha apuntado Alejandro en el post,analizando los datos sociologicos, los ciudadanos no estan de acuerdo con los partidos politicos actuales, que solo quieren repartirse el pastel y para cuando ¿convencer a los ciudadanos con propuestas y argumentos?…..
un saludo
Acaso antes de la resolución de la ONU se pidiera (no sé de dónde saca Ud. los porcentajes) una intervención diplomática o una mediación pacífica, no sólo en este conflicto, sino en los muchos que hay repartidos por todo el planeta. Después de la carta blanca que supone la resolución y que sólo sirve para que algunos acallen sus conciencias, no sé lo que pensará la sociedad española y mundial. Yo, desde luego y mis más cercanos allegados, pensamos que el ser humano debería haber evolucionado lo suficiente como para resolver los problemas a través del diálogo. Cuanto más tardemos en iniciar este camino más tarde alcanzaremos el objetivo.
No se trata de estar a favor o en contra de Gadafi, esto es puro reduccionismo manipulador. Se trata de que en algún momento y en algún punto se ha de cortar la inercia de la violencia y los partidos que están en el poder quizá tienen las manos tan manchadas que acaso no sean capaces de retroceder, por eso algunos «ingenuos» habíamos confiado en esta opción. Me perdonará Ud. pero yo no veo por ningún lado los aires nuevos que justifican la contaminación del aire y la tierra, eso sin contar con el sufrimiento que supone vivir bajo el fuego cruzado pensando que cuando todo acabe (nadie sabe si tarde o temprano) tendrán que reconstruir el país que destruyeron queriendo salvarles. Pero bueno, incluso para esto, para le reconstrucción del país seguro que ya hay algunos «voluntariosos» dispuestos a ofrecer sus empresas para tal fin.
la ola verde española, lo que debería aprender, es que no se puede estar en misa rogando y con el mazo dando. Lo digo porque no tiene mucho sentido estar en contra de la Energía nuclear, y estar a favor de lanzar bombas y apoyar una guerra como lo ha hecho Equo. ¿A que no lo hicieron los verdes alemanes? Ahhh, primer lección: hay que ser coherente.
Ni Equo ni los verdes alemanes estamos a favor de lanzar bombas ni apoyar guerras. Ambos, ellos y nosotros, hemos apoyado una resolución de Naciones Unidas para proteger a la población civil de Libia de las agresiones que estaba sufriendo con armamento militar por parte de Gadafi. Perfectamente coherente con lo que la mayoría de la gente, los medios de comunicación, las ONG de defensa de DDHH, etc., y los propios libios, estuvieron pidiendo durante días.
No al Uranio enriquecido si a laznzar bomba fabricadas con uranio empobrecido
Equo está terminantemente en contra de la utilización de proyectiles antitanque u otro armamento con armadura de uranio empobrecido que es cancerígeno incluso para los que lo manejan. El Parlamento Europeo ha pedido reiteradamente su prohibición y el Primer Ministro británico ha afirmado que sus aviones no los utilizan. El almirante norteamericano también ha negado su utilización en Libia; no tengo noticia de los franceses, pero me extraña que se puedan usar en una misión así, tras los nefastos precedentes de Iraq y Yugoslavia.
Parece ser que los únicos que tienen la conciencia tranquila son los que dicen ser los pacifistas de ahora mismo; pues bien, no voy a competir por ver quien tiene la conciencia más virginal, en la vida real uno se mancha y se equivoca. Personalmente prefiero equivocarme posicionándome del lado de los que exigen la democracia frente al poder absoluto, tratando de salvarles la vida con una intervención militar, y ayudándoles al logro de la democracia en su país. No sé si soy pacifista, pero sí me tengo por una persona pacifica y no puedo sentirme bien viendo como un dictador se ríe de nuestros embargos, mientras masacra a su pueblo y los países democráticos permaneciendo neutrales, eso sí, protestando y diciéndole que es injusto lo que hace.
Sofia:
La resolucion de la ONU, fué demasiado tarde, para algunos, pues Gadafi, estaba usando la violencia contra los que en un primer momento, se manisfestaban pacificamente….
Respecto al «reduccionismo manipulador» lo practica VD, cuando solo cita lanzar bombas, teniendo en cuenta, que la primera resolucion de la ONU, fue aviso a Gadafi con medidas disuasorias y actualmente, se esta actuando por las vias diplomaticas y de otro tipo. No se, que haría Vd, si alguien le ataca violentamente y puede matarle, se defenderia aunque fuera pacifista.
Respecto de donde saco, los datos de las encuestas. Por supuesto de los medios de comunicacion, que las recogen de los Institutos de Opinion publica.
La que he citado, creo era del CIS
un saludo
Ya están algunos mezclando las cosas, que tendrá que ver ahora el tema japonés con este tema? no seamos demagogos ni papistas.
Alberto, sólo por curiosidad, ¿quién ha hecho referencia «al tema japonés» en esta conversación?
Pues Luis.
De momento, creo que Equo tendrá que luchar mucho por distinguirse, por un lado, de los modelos políticos a que estamos acostumbrados. Esa diferenciación está sido la clave, creo, de las candidaturas ecologistas francesa y alemana. A lo que hay que unir, por supuesto, una labor de años y un buen número de personalidades mediáticas que abarcan un espectro muy amplio y diverso (Bové, Cohn-Bendit, Mamère…) sin que ello implique la atomización del discurso. Les ha costado llegar a elaborar un lenguaje propio, comprensible, y a alejarse de la demagogia al uso en los medios políticos sin por ello renunciar a ser mediáticos, pero parece que lo están consiguiendo. Y además Equo va a tener que romper la desconfianza que como alternativa han generado en un electorado progresista y muy crítico (su electorado ‘natural’, creo yo) la trayectoria errática de los diversos grupos que han querido entrar en la política por la vía de la ecología. A propósito de esto, siempre me ha resultado chocante el prestigio de que por lo general gozan en España las Organizaciones Ecologistas y ONGs mediambientales o conservacionistas y el poco calado electoral de las propuestas políticas ecologistas. Un saludo.
Completamente de acuerdo en transmitir a la sociedad española la informacion necesaria para que las gentes comprendan qué es una opción política verde; quizá necesitemos deshacer estereotipos sobre el ecologismo, la conservacion de la naturaleza, etc y darle la perspectiva de la ecologia social, la ecopolítica y otras ideas que son prácticamente desconocidas por la mayoría de la población.
Opino además que nuestro intento no está en alcanzar el poder sino en retornar en lo posible a un mundo equilibrado, justo, pacífico y en armonía con la poca naturaleza que nos queda. Nuestro objetivo es tanto hacer nosotros (los verdes) como conseguir que hagan (otros partidos y especialmente quien/es gobiernen).
En estos momentos, un partido verde representativo cumplirá dos funciones:
1)una oposicón clara a las lineas políticas actuales en el sentido de denunciar, protestar, y ejercer fuerza parlamentaria para las reformas legislativas y otras medidas de gobierno.
2) Servir de competidores que obliguen a las otras fuerzas políticas a adoptar medidas más afines a nuestros objetivos con el fin de no perder votos.
Si Equo, cada vez que se posiciona, se plantea «¿qué es lo que haríamos si de verdad gobernáramos?», puede arrancar votos hasta de centro derecha. La idea de un supuesto «electorado natural» de izquierdas hay que desbordarla por completo. Los planteamientos de la ecología política son de tal sensatez que, bien planteados, pueden llegar a un espectro sociológico muy amplio. No hay por qué atarse al esquema derecha-izquierda ni autolimitarse a una franja muy definida del electorado.
No comprendo a un partido político que no se defina en una clara posición, dentro del espectro político, para ganar el mayor numero de votos posibles; a no ser que lo que persiga no sea otra cosa que el poder por el poder.
Y si lo que a un ecologista le importa es únicamente las medidas políticas en materia medioambiental y fuentes energéticas, ¿qué sucederá con el resto de la política? ¿se pueden tomar decisiones políticas sin definirse?
juanjoluque: te queria decir, que lo que dices, no se corresponde con la realidad.
Equo, no es un partido politico, de momento, lo será cara a las proximas elecciones.
Suponpo que no te has informado del manifiesto de la FUNDACION EQUO (que es lo que es ahora).
Muchas de las personas, que apoyamos este movimiento, sociopolitico, queremos debatir ideas y argumentar con una mentalidad abierta y CONSTRUCTIVA, y lo importante es aportar informaciones y puntos de vista, pero con datos objetivos y NO DESCALIFICACIONES POR PRINCIPIO, SIN TENER INFORMACION.
un saludo
Paz, estaba respondiendo al comentario anterior, que dice que es mejor no posicionarse en una franja muy definida para llegar a un espectro sociológico muy amplio. Supongo que la política es una cuestión de afinidades y no una cuestión de mercado.
Equo no es un partido político, aún, pero si quiere serlo, tendrá de posicionarse dentro del espectro político. Yo tan sólo daba mi opinión al respecto; y si equo se define de izquierdas, como me da la impresión, tendrá mi voto; si no es así, lo más seguro es que me abstenga, porque la posición de IU en el conflicto de Libia me ha desencantado profundamente.
En cuanto a las mayúsculas, supongo que es una forma de subrayar y no significa que estás gritándome; porque está muy feo gritarle a la gente, cuando se va de tolerante. Y creo que diferir no significa descalificar.
juanjoluque:
La unica cuestion, que queria subrayar era, que en la comunicacion de diferentes posturas era importante la información previa Y me estaba refiriendo a cuando dices, que como ecologismo poltico, SOLO, le interesaba las cuestiones ambientales y energéticas.
Respecto a enfatizar con mayusculas, es una forma de expresión que no creo, tenga que ver, con gritar, sino con subrayar como tu mismo has dicho las ideas , que me parecen importantes desde mi punto de vista.
Esta aclaracion te la hago, no con afan de polemizar, sino, estando totalmente de acuerdo contigo, que el gritar no es el sistema y no me parece bien.
Te pido disculpas, si te he molestado, con mi intervención, desde luego no lo pretendia.
un saludo
No me refería a Equo, sino a aquellos que, tal vez, desde el ecologismo se plantean, como estrategia, que es posible llegar a un amplísimo sector de la sociedad (derecha e izquierda); ya que las cuestiones ecologistas pueden ser abrazadas desde distintas sensibilidades políticas. Y trataba de decirle a Javier, que eso es muy difícil desde una actitud de honestidad, puesto que en política hay más asuntos que solucionar y necesariamente, al tomar una decisión, hay decantarse por una de esas sensibilidades; incluso posicionándose en el centro, no es lo mismo el centro derecha que el centro izquierda.
Juanjoluke, no defiendo posturas ambientalistas neutras. Al revés, si Equo tiene futuro es posicionándose en todos los terrenos, no sólo en asuntos ambientales, porque la ecología política tiene suficiente calado como para inspirar posiciones en todos los campos. En cuanto al electorado potencial, es interesante la entrevista a Cem Özdemir, lider de los Verdes alemanes en El País del pasado domingo, donde comenta cómo en Baden-Württemberg les han votado campesinos tradicionalmente simpatizantes de los democristianos.
http://www.elpais.com/articulo/reportajes/politico/reverdece/Alemania/elpepusocdmg/20110403elpdmgrep_7/Tes
Bueno, no vamos a entrar en los motivos que tiene cada cual para votar a una u otra formación, o las distintas coyunturas que puedan favorecer a un determinado partido; sino con qué programa se presenta ante el electorado, y esto define a una formación política, más hacia la izquierda o a la derecha.
Rajoy ha dicho que si gana las generales quitará la nueva ley de aborto; así pues, si sucede esto, podría también quitar el matrimonio gay, poner el copago en la sanidad y educación, etc. Estar a favor o en contra de estas medidas posiciona a un partido político a un lado o a otro, y esto hace que le puedan votar unos y no otros, coyunturas de castigo al gobierno aparte.
Una cosa es el pragmatismo que te permite negociar con fuerzas políticas contrarias, o tener que tomar determinadas medidas, no en línea con el propio ideario, en situaciones especiales, o el eclecticismo de tratar de hacer posible la convivencia del socialismo en el capitalismo, y otra muy distinta, es no tener una posición definida en política.
En cualquier caso, personalmente, veo que si Equo se presenta como partido, donde tiene más posibilidades de obtención de votos es entre los abstencionistas de izquierdas y desencantados con los partidos de izquierdas; porque en la derecha española no se da el abstencionismo, y no hay desilusionados.
Vale, Juanjoluke, estoy de acuerdo contigo, aun que no hay que olvidar que todo se mueve, y más en política.